La Lupe de Chueca es un microcosmos donde toda la esencia de la capital española se condensa y se hace única. Es una coctelería donde se agitan los mejores tragos de la ciudad, en un ambiente única y rodeado de una decoración aún más única que deja a todos los visitantes sorprendidos.
Si pasas por Chueca y no se te ocurre ningún plan ten siempre en mente La Lupe de Chueca.
El tiempo volaba en La Lupe. Me gusta la música que ponen aquí, un rollito más alternativo, house y cosas así. Lo mejor del sitio son los cócteles, los hacen de maravilla. La Lupe es un local en el que me solia reunir con los amigos para empezar la noche, aunque más de una vez lo que era empezar terminaba por también acabar allí, ya que se nos pasaba el tiempo volando.
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alain
Chic, aunque sea por una noche. La Lupe de Chueca es un garito pequeño pero acogedor (como la mayoría de los que hay por la zona) y da gusto entrar en él para poder tomar algo (cockteles sobre todo) y disfrutar de su ambiente, de su gente y de su música. Precisamente la música es sobre todo chill out, house, etc. Es decir, lo más chic para la gente más chic. Yo no lo soy ni me lo considero, pero por esa noche sí que llegué a pensar que lo era...
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indienauta
Buen bar de copas. No conozco muchos bares de Chueca, pero este sí, y tengo que decir que está muy bien montado. A pesar de que la música que ponen (mas bien house) no la escucho nunca, me llegó a enganchar. Un sitio divertido, en el que es bien recibido todo el mundo, sin distinciones.
Su valoración:
Claudia23
Horas felices en la Lupe. Es muy chic los domingos de resaca ir por ahí a tomar un cócktel en Madrid. Así comencé a frecuentar la Lupe de Chueca. La decoración en general me gusta aunque quizá la lámpara rococó que hay casi al final de la barra me asuste un poco.
Lugar idóneo para ir con unos amigos a charlar un ratito en las horas felices, lo que el bolsillo suele agradecer. Como recomendación, la piña colada, exquisita.
Su valoración:
amsterdam
Para empezar la noche en Chueca. Quedé allí con unos amigos. No los encontraba. El bar estaba llenísimo y me daba mucha pereza meterme al fondo. Es uno de esos pubs alargados donde la gente se agolpa frente a la barra y a penas queda sitio para pasar. Al final me decidí. Fui sorteando gente. Al fondo había una actuación, pero yo no le estaba prestando mucha atención. Sólo estaba pendiente de encontrar a mis amigos. Entonces escuché que decían por el micro el nombre de mi amiga. Miré al escenario y allí estaba, con una boa de plumas bailando con "La Piña", una drag queen que ha elegido ese nombre porque tiene la misma forma que la fruta. Y es que a mi pobre amiga que es pequeñita, no se le veía detrás de esa "mujer" de tan considerables dimensiones. Fue el comienzo de una noche memorable.
