Qué visitar en Ordesa y Monte Perdido

Si quieres saber todo lo que visitar en Ordesa y Monte Perdido, toma nota de nuestra recomendaciones. ¡Es un paraíso ideal para los amantes de la naturaleza!

Tozal del Mallo

Adentrarse en la majestuosidad de Ordesa y Monte Perdido es como abrir un libro de maravillas naturales, y entre sus páginas más emocionantes se encuentra el imponente Tozal del Mallo. Si Yosemite tiene su icónico Capitán, aquí encontramos su equivalente en el Tozal del Mallo, un monumento de historia y morfología que compite en grandeza.

Al asomarte a sus vertiginosos 300 metros de pared vertical al comienzo del Valle de Ordesa, la sensación es abrumadora. Su imponente presencia recuerda a los riscos que dominan los paisajes norteamericanos. La vertiginosa pared sur se ha convertido en un templo para los escaladores en España, una meca donde solo los más valientes con forma física, conocimiento montañero y la ausencia de vértigo se aventuran a ascender por su ruta normal.

Miradores de Ordesa y Monte Perdido

Pero si prefieres explorar estas maravillas naturales sin adentrarte en la escalada extrema, los miradores te ofrecen una perspectiva igualmente deslumbrante. Siguiendo un recorrido que bordea el borde meridional del cañón de Ordesa, este trayecto se convierte en un regalo para los sentidos. Aunque a menudo es posible realizarlo en taxi desde Ordesa, el camino se despliega a unos pocos cientos de metros por encima de la Senda de los Cazadores, conectando Torla y Fanlo. Perfecto para aquellos que buscan una experiencia menos extenuante, esta excursión se detiene en una serie de miradores estratégicos que coronan los límites de la profunda hendidura esculpida por el río Arrazas, formando la majestuosa Sierra de las Cutas.

Desde estos puntos privilegiados, la panorámica se extiende en una exhibición de los tesoros de este parque nacional. Cascada de Cotatuero, la brecha de Rolando y las Tres Sorores emergen como joyas en la corona de la naturaleza. Las tres montañas reinas, Cilindro, Sound de Ramond y el legendario Monte Perdido, revelan su grandeza desde esta perspectiva elevada. Si la fortuna te sonríe, el espectáculo se convierte en algo inolvidable cuando los majestuosos quebrantahuesos, residentes del parque, surcan el aire a la altura de tus ojos. El encuentro con estas criaturas en pleno vuelo agrega un toque de magia indescriptible a esta experiencia de observación.

Las Bodegas de Aínsa

Disfrutar de la gastronomía de la región es, también, otra de las cosas que visitar en Ordesa y Monte Perdido Y esto lo podrás hacer en las Bodegas de Aínsa, un restaurante situado en la plaza Mayor de Aínsa, en la provincia de Huesca.

Se trata de un establecimiento con decoración rústica y tradicional que ayuda a fomentar esa esencia de montaña tan típica de esta zona. En Las Bodegas de Aínsa podrás disfrutar de un menú de cocina tradicional, con recetas caseras elaboradas con productos autóctonos. También encontrarás una carta de tapas para que puedas disfrutar de una comida más informal junto a los tuyos.

Restaurante El Duende

Ahora vamos a hablarte de otro de los mejores restaurantes de la zona. El Restaurante El Duende es uno de los establecimientos gastronómicos más populares de Torla. Se trata de un lugar decorado de forma rural y tradicional ya que se halla construido en una antigua casa del 1831.

Abierto desde el 2002, el Restaurante El Duende se encuentra en el corazón del casco histórico de la localidad, en un rincón repleto de encanto y muy pintoresco. En su propuesta gastronómico encontrarás una interesante fusión de la cocina de ahora y la de ayer con platos sorprendentes y exquisitos.

Aquí te contamos dónde comer bien y barato en Huesca.

Si vas a visitar Ordesa y Monte Perdido con niños, aquí tienes algunos buenos planes en familia que, seguro, les encantarán.

Casa Pirinea - Casa Rural en Ordesa

¿Quieres disfrutar de un alojamiento en plena naturaleza? Entonces tienes que conocer Casa Pirinea, una casa rural situada en la entrada del Parque Nacional de Ordesa, en Huesca. Este establecimiento tradicional está decorado con motivos propios de la montaña y cuenta con instalaciones idóneas para que disfrutes de un fin de semana de relax y desconexión.

Debido a su privilegiada ubicación en la Casa Pirinea podrás disfrutar de un sinfín de deportes de aventura y excursiones al aire libre. Algunas de las actividades que podrás contratar desde el mismo establecimiento serán barranquismo, rutas de senderismo, kayaks, raquetas de nieve, rafting, paseo con caballos y un largo etcétera.

Caballos Casa Blas

¿Quieres disfrutar de una actividad ideal para toda la familia? En Caballos Casa Blas te ofrecen una salida inolvidable para que descubras un entorno de pura naturaleza a lomos de bellos y fuertes caballos. Esta hípica se encuentra en en la zona del Parque Natural de Ordesa y Monte Perdido, una zona perfecta para desconectar del día a día y disfrutar de impresionantes paisajes naturales.

En Caballos Casa Blas ofrecen diferentes recorridos y rutas dependiendo del nivel y la experiencia de cada grupo. Durante estos paseos se recorren los antiguos caminos de caballos que atravesaban el Valle de Broto y las zonas colindantes. Por ello, en estas rutas no solo disfrutarás de una experiencia natural sino, también, histórica. Una actividad que es apta para todos los públicos y los niveles y que te mostrará una faceta increíble de esta región aragonesa.

Multiaventura en Huesca

Si quieres adentrarte a un paisaje fascinante y descubrir todos sus recovecos te recomendamos que descubras Multiaventura en Huesca, una empresa especializada en ofrecer una gran variedad de actividades de aventura en estos bellos parajes de Aragón.

Descubre esta fascinante zona de los Pirineos con Multiaventura en Huesca y disfruta de actividades para toda la familia como, por ejemplo, vías ferratas, rafting, barranquismo en los Pirineos, raquetas de nieve, senderismo, espeleología, etcétera. Esta empresa de aventura ofrece actividades pensadas para adultos pero, también, para familias con niños.

En Salir.com te descubrimos los mejores sitios para hacer rutas con raquetas de nieve en Huesca.

Descubre la majestuosidad de Ordesa y Monte Perdido a través de sus rutas más cautivadoras, que te llevarán a recorrer paisajes de ensueño y a conectar con la naturaleza en su máxima expresión. Descubre las rutas que visitar en Ordesa y Monte Perdido SÍ O SÍ.

El Camino de las Cascadas

El Camino de las Cascadas es el alma del valle de Ordesa, una ruta que te sumerge en la exuberancia del parque de principio a fin. Desde la Pradera, puedes comenzar este cómodo sendero que se desliza a lo largo del cañón de Ordesa. El viaje es un regalo para los sentidos, ya que cada rincón revela la razón detrás de su nombre. Miradores estratégicos te permiten contemplar el poderoso río Arrazas y sus cascadas, una de las exhibiciones más espectaculares de caídas de agua en la Península Ibérica. Desde la cascada de Arripas hasta la misteriosa Cueva, cada parada te sumerge en la grandeza de la naturaleza en su estado más puro.

Senda de los Cazadores

Contrarrestando la serenidad del Camino de las Cascadas, la Senda de los Cazadores se despliega en la ladera sur del valle, ofreciendo una experiencia montaraz y cautivadora. Ideal para recorrer de regreso desde la Cola de Caballo, este sendero sigue la repisa de la faja Pelay. Con la montaña a un lado y el precipicio al otro, te invita a caminar con atención mientras te deleitas con las vistas. El mirador de Calcilarruego, colgado al vacío, se convierte en un escenario mágico al atardecer, iluminando las majestuosas paredes del Tozal del Mallo y más.

Cola de Caballo

El Valle de Ordesa acoge una de las rutas más populares y emblemáticas: la Cola de Caballo. Este sendero, que alberga una fusión perfecta de elementos naturales y vistas impresionantes, es un verdadero regalo para los sentidos. Desde ríos y cascadas hasta bosques de hayas y el magnífico Monte Perdido, la diversidad de maravillas es asombrosa. Sin embargo, su fama no es en vano, y en épocas de mayor afluencia, es recomendable verificar la disponibilidad de acceso, ya que la demanda puede limitar el número de visitantes.

Faja de las Flores

Si buscas un desafío más audaz, la Faja de las Flores te espera con sus pasajes aéreos y emocionantes. Esta repisa horizontal que abraza las altas paredes del Gallinero es una experiencia de otro nivel. Con vistas panorámicas que revelan Ordesa desde una perspectiva de pájaro, este sendero te rodea de una profusión de flores, desde lirios hasta el emblemático edelweiss. Cada paso es una conexión íntima con la belleza y la grandiosidad de la naturaleza.

Circuito de San Úrbez

Para una excursión familiar llena de maravillas, el Circuito de San Úrbez en el sector Añisclo es una elección perfecta. Desde el impresionante recorrido en coche hasta el punto de partida, hasta la ruta circular en sí, esta experiencia es una mezcla de naturaleza y cultura. La ermita de San Úrbez es el objetivo final, pero el viaje está lleno de vistas panorámicas y oportunidades para conectarse con la belleza circundante.

Las Ermitas de Tella

Aunque no se encuentra dentro de los límites del Parque Nacional, Tella es una joya cercana que merece explorarse. La ruta de las tres ermitas te guía a través de este encantador pueblo y sus alrededores. Disfruta de una experiencia sencilla y gratificante mientras descubres la historia y la arquitectura de las ermitas en un entorno natural impresionante.

Los pueblos son otro de los puntos imprescindibles que visitar en Ordesa y Monte Perdido. Sumérgete en un viaje a través de la belleza inigualable de los pueblos de Ordesa, donde la historia y la naturaleza se entrelazan en una sinfonía de encanto y tranquilidad.

Torla

Como una joya al pie del valle, Torla es el preludio esencial para cualquier aventura en Ordesa. Su casco antiguo, coronado por la torre de la iglesia de San Salvador, se alza sobre un escenario de rocas y naturaleza. Desde aquí, los tonos rojizos del imponente Mondarruego, guardián del valle, pintan el paisaje. Las callejuelas estrechas y las casonas de estilo altoaragonés, como la Casa de los Viu, añaden una atmósfera medieval a esta villa. A las puertas del pueblo, el Centro de Visitantes del Parque Nacional de Ordesa abre sus puertas, compartiendo historias sobre la región y la emblemática cabra montesa pirenaica, el bucardo.

Broto

Broto, enclavado en el corazón del Valle de Broto, se divide en dos por las aguas del caudaloso río Ara. Los barrios de Santa Cruz y los Porches encarnan la modestia y el encanto de este rincón altoaragonés. Sus vistas panorámicas capturan el espíritu de la naturaleza, brindando una experiencia de paz y desconexión. El verde de las montañas, las aguas plateadas del río y las tradiciones ancestrales crean la esencia del turismo rural. El paso de ganaderos acompañados de vacas rubias y un majestuoso toro se convierte en una imagen pintoresca cotidiana.

Sarvisé

A orillas del río Ara y rodeado por praderas y montañas, Sarvisé emerge a 863 metros sobre el nivel del mar. Con apenas un centenar de habitantes, este rincón ofrece refugio en casas rurales y momentos para vivir el presente. El bar El Chiringuito se convierte en un oasis de cervezas artesanales, vinos locales y pacharán ordesano bajo la sombra de manzanos. Caballos Sarvisé, dirigido por los mismos propietarios, invita a conectarse con la naturaleza a través de paseos a caballo.

Bielsa

Otra entrada al parque y último pueblo antes de cruzar la frontera con Francia, Bielsa ha superado adversidades históricas para conservar su encanto. El legado de la guerra civil en los Pirineos fue reconstruido por la comunidad local y sus vecinos. La Iglesia de Bielsa, del siglo XVI, alberga tesoros como el sarcófago del Santo y Anacoreta Froilán del siglo IV, agregando profundidad histórica.

Boltaña

Boltaña es otro de los pueblos que visitar en Ordesa y Monte Perdido. A 643 metros de altitud, Boltaña ofrece un escenario para explorar actividades como la espeleología y el barranquismo. Buitres y quebrantahuesos surcan los cielos sobre esta localidad que se alza a las orillas del río Ara. Su casco histórico, con calles empedradas y edificios pirenaicos, y el majestuoso Hotel Barceló Monasterio de Boltaña, construido sobre un monasterio del siglo XVII, añaden un toque de historia.

Aínsa

Para culminar este viaje a través de los pueblos más bellos que visitar en Ordesa y Monte Perdido, Aínsa emerge como una perla medieval con una rica historia ancestral. Desde la iglesia de Santa María hasta el Castillo y la torre del homenaje, este municipio te sumerge en su legado. Las visitas temáticas y teatralizadas te permiten revivir su historia mientras exploras sus murallas medievales y plazas. Las tiendas y restaurantes locales añaden toques auténticos a esta experiencia, con delicias como la cerveza Tronzadora, patés de caza y longanizas de Graus.

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